¿Conoces los 10 mandamientos del perezoso?

Mandamiento #1: Se nace cansado y se vive para descansar.

Suena muy chistoso y lo es, pero en muchas ocasiones nos dejamos llevar por estas cosas sin saberlo y no debemos serlo, la palabra de Dios dice: 1 Pedro 4:2 “para no vivir el tiempo que resta en la carne, conforme a las concupiscencias de los hombres, sino conforme a la voluntad de Dios”.

Mandamiento #2: Ama tu cama como a ti mismo.

Todos sabemos que es muy rico poder dormir con buenas cobijas y en pijama, y eso no está mal. Lo que no está bien, es dejar que eso te consuma más horas de las necesarias, porque en ocasiones hay personas que se vuelven antisociales, únicamente por estar todo el tiempo en una cama, perdiendo bendiciones y oportunidades.

En vez de amar tu cama, recuerda Mateo 22:36-40, “Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primer y más grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas”.

Mandamiento #3: Si ves a alguien descansando, ayúdalo.

Pero ayúdalo a levantarse de esa pereza en la que está. Es bueno descansar, Dios mismo descansó el séptimo día, pero descansó después de la gran labor de crear todo el universo. Descansar no está mal, el exceso de descanso es el que está mal, ya que te conviertes en una persona negligente y bien dice la palabra de Dios, Proverbios 10:4-5 “La mano negligente empobrece; Mas la mano de los diligentes enriquece”.

Mandamiento #4: Descansa de día para que puedas dormir de noche

Si estás de vacaciones, es delicioso descansar, Dios nos manda a descansar, el pecado está cuando abusamos de ese descanso y perdemos nuestro tiempo. Hay muchas cosas que podemos recuperar, pero el tiempo no es una de ellas, Pablo dice que aprovechemos bien el tiempo porque los días son malos. Dios tiene planes con nuestras vidas, pero solo podremos descubrirlos cuando nos levantemos y pongamos acción a nuestra fe, recuerda que la fe sin obras es muerta. Santiago 2:14

Mandamiento #5: El trabajo es sagrado, no lo toques.

Unas de las maneras en las que más se evidencia la pereza es dónde y en qué trabajamos. Los estudiosos confirman que eso se denomina “Flojera laboral”, hacer las cosas sin ánimo ni propósito no traerá ninguna recompensa.

Jeremías 48:10 dice que es maldito aquella persona que hace de mala gana lo que Dios le ha ordenado.

Muchos tienen que trabajar para poder vivir, otros viven para poder trabajar, sea como sea, no puedes ser una persona negligente a este tipo de personas no se les puede confiar nada porque dejan todo a medias, Jesús lo mostró en la parábola de los talentos, a los que multiplicaron lo que su señor les dio los bendijo más, pero el que escogió su don en la tierra dice el pasaje que su señor le dijo: “Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.” Mateo 25:26-28

Mandamiento #6: No hagas hoy lo que puedas hacer mañana.

Esto es algo que caracteriza a muchos y es dejar las cosas siempre para después, por pura y física pereza, ¿qué cosas has dejado para el día siguiente, que por no haberlas hecho cuando tocaba te fue mal?

La palabra de Dios dice en Proverbios 13:4 “El alma del perezoso desea, y nada alcanza; Mas el alma de los diligentes será prosperada”

Mandamiento #7: Trabaja lo menos que puedas, lo que tengas que hacer que lo haga otro.

Este tipo de personas son aquellas que, en los grupos de trabajo quieren que los demás hagan todo, yo les voy a decir como Pablo escribió a los cristianos de Tesalónica “Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma” 2 Tesalonicenses 3:10

Dios no bendice a los vagos, y eso lo podemos leer a profundidad en el libro de Proverbios.

Mandamiento #8: ¡Calma! Nunca nadie se murió por descansar.

La Biblia dice en Eclesiastés 3 “Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar; tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz”

Mandamiento #9: Cuando sientas deseos de trabajar, siéntate y espera que se te pase.

Cuando leí esta frase vino a mi memoria este versículo “El que recoge en el verano es hombre entendido; El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza” Proverbios 10:5.

Las cosas no se harán por arte de magia, si quieres alcanzar tus sueños, si quieres ser una persona que se siente exitosa en lo que hace, debes ser diligente y entender en qué tiempo estás.

Mandamiento #10: Si el trabajo es salud, que trabajen los enfermos.

Suenan muy chistoso todos estos mitos, pero a mucha gente le cuesta trabajar y quieren después que les den un subsidio por no hacer nada, pero los hijos de Dios debemos hacer todas nuestras cosas como para el Señor, en Colosenses 3:23-24 dice “Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres; sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís”.